No estoy de acuerdo con un programa tan dócil, edulcurado, y supereditado de la realidad cubana.
Basta el comienzo cuando la chica dice: ¡al fin podemos hacer un programa desde la habana! Esto quiere decir que ya se intentó antes. ¿Y por qué entonces no se hizo y ahora sí? Una posible respuesta: ¡porque el gobierno cubano aceptó el guión, aceptó a los entrevistados, etc! Fíjense, cuando los entrevistados comienza a hablar del sistema , cómo cortan lo que dicen, lo editan.
Siempre he pensado que los extranjeros que viven en Cuba no pueden opinar como un cubano. En primer lugar porque tienen negocios, o dinero, y no sufren ni la mitad de lo que sufre la población entera.
La mujer del entrevistado Equis, no es casual, ni es interrogante. Equis (menudo nombre) es hijo de un grupo afín al Gobierno, Síntesis, que como la mayoría de la gente en Cuba, si no hablas mal del país podrás hacer tu trabajo, en su caso hacer música y viajar: sinónimo de dinero, sinónimo de vivir holgadamente en la habana y con privilegios.
Que los niños jueguen en la calle no es precisamente una virtud sino una oportunidad de jugar a falta de parques en condiciones. Perdieron una ocasión en preguntar a los niños con qué jugaban. Te habrían respondido: con aros de metal afilados y oxidados, con medias o calcetines convertidas en pelotas, con rodamientos viejos. También perdieron otra oportunidad al entrar en las desvencijadas casas de la habana que se muestran como algo decorativo del vídeo, que sólo esperan la próxima lluvia para caer, y preguntar a sus habitantes.
Igual se habrían encontrado a mi tío que vive con su mujer e hija en apenas 2 metros cuadrados, como si la vida misma fuese una miniatura de esperanza. Habrían visto cómo unos palos hacen el papel de bastón, así como una columna más del edificio en el medio del salón, en cualquier casa. Eso sí hubiera sido bonito y plácido de ver.
Señores. Esto no es política. Es ser consecuente con lo que se quiere mostrar, o con la realidad que se habría podido mostrar. Contar a medias, es engañar.
Sigue el hilo de este problema:
Un bloguero escribe a TVE quejándose.
TVE responde con evasivas.
El bloguero replica la respuesta de TVE.